sábado, 3 de noviembre de 2012

UNA MIRADA INOCENTE

Se despide Octubre pero no sin antes traer a la memoria un hecho increíble y alucinante que sucedía el Domingo 14. Aquel día nos despedíamos de la playa, del aun caluroso sol otoñal y llegábamos a nuestro frió destino con lo que el día se presentaba cambiante e inquietante. La primera en recordar lo que ese día estaba a punto de suceder a kilómetros de distancia  fue nuestra pequeña.  Un loco para muchos un héroe para otros. Se tiraría en palabras de nuestra pequeña "desde el infinito". Para quienes seguimos este hecho en directo desde la TV claro... Vivimos verdaderos momentos de nerviosismo y emoción. Todo podía pasar, debo confesaros que yo egoistamente pensaba en que por favor ese hombre no muriera puesto que que mi peque estaba viéndolo y ella sabia que esto era en tiempo real. Un hecho que cautivo tanto a niños como a mayores. Seguro que ya sabéis a quien me refiero, pues si, Aquel hombre con un apellido difícil de pronunciar pero que no se olvidara tan fácilmente. El primer hombre en saltar desde la estratosfera y su hazaña ha tenido un final feliz. Félix Baumgarther. Gracias por demostrar que aunque los sueños se vean ingreiblemente lejos se pueden alcanzar solo hace falta soñar... Y dese una inocente mirada aquí va nuestro pequeño homenaje a tan gran hazaña con final feliz.      
                                                                        
Ya hemos subido bastante!!! 

Aya vamos!!!  Que sea lo que Dios quiera!!!

Geronimo!!!  Al agua pato!!!

Esto esta Chupao!!!  JAJAJA

Lo consegui!!!  Si señor!!!  Aleluya!!!
                                                                        

2 comentarios:

  1. Los limites están para romperlos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Caro que si amigo. Aunque yo recomiendo cautela. Cierto es que si muchos personajes de la historia no hubieran arriesgado aun seguiríamos creyendo que el mundo es redondo por ejemplo y muchas otras cosas... Gracias por comentar "desde una mirada inocente"

      Eliminar